jueves, 5 de junio de 2008

Chilena


La chilena es un canto y un baile que pertenece a toda la América. Cuando llegó con los conquistadores la cueca se llamó canto a la rueda. Chilena quizás se llamó para la Independencia de los Carrera.

Nada es separable y sólo hay orden matemático en su complejo estilo, tanto en la formación geométrica como en el número exacto. Es la unidad de lo múltiple, es la totalidad y el conjunto y un organismo musical y poético. Primero la estructura unitaria de la forma escrita y después, durante su expresión verbal, al desarrollarse los 16 metros en 48 compases, sale el alma viva del cuerpo buscando el espacio infinito. Es la materia estática y el espíritu abstracto en actividad. Se entabla una lucha entre el objeto físico y la práctica del canto, o sea, cuando la expresión pone en movimiento lo inmóvil, para que se desgrane el ciclo de nuevas métricas de música y poesía, nos deja frente a un mundo único lleno de fórmulas mágicas. Es también una encrucijada donde se abarcan, se cristalizan y perpetúan todas las esencias y glorias del arte.

La chilena tiene 3 sílabas y es rueda. Chilena se tendrá que llamar a ese canto a la rueda de las fondas, que salió a la calle llamando a los mestizos a jugarse la vida por la de ellos, por la libertad de Chile. Por eso es que el tamboreo y la bulla de las fondas reviven en los días de Septiembre con los recuerdos de la Independencia. Y es así como el grito de las cortes del faraón y los califas, y el canto más difícil que tuvo la fiesta de la zambra, se transforma en himno de guerra, para combatir el coloniaje y ser la máxima expresión de un pueblo.
Fernando González Marabolí

Claro, Samuel. Chilena o cueca tradicional de acuerdo con las enseñanzas de Don Fernando González Marabolí. Ediciones Universidad Católica De Chile. Santiago, 1994.